domingo, 27 de enero de 2019


Detecta la CNDH serias deficiencias en el hospital psiquiátrico de La Paz


Tulio Ortiz Uribe
Un informe preparado por el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, dependiente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, documenta el trato a los pacientes y las deficiencias que encontró en el Hospital Psiquiátrico de La Paz, luego de una visita de inspección en los meses de mayo y junio pasados.
El documento informa que de las 39 unidades visitadas en todo el país, el Hospital Psiquiátrico de La Paz, junto con la Unidad de Rehabilitación Psiquiátrica de Nuevo León, son las que cuentan con mayores factores de riesgo (12 de un total de 17).
Por ejemplo, en el hospital de La Paz se aísla a los pacientes como una forma de tratamiento, pero informa que esto "es innecesario y violatorio de los derechos humanos, no sólo porque se trata de actos que vulneran el derecho a la integridad personal, sino por el riesgo de que ese tipo de actos pueda constituir una práctica por parte del personal médico de los hospitales psiquiátricos"
Por otra parte, se encontraron  serias deficiencias en el mobiliario e infraestructura de la institución, que "afectan la calidad en la prestación del servicio médico e impiden que los pacientes sean alojados en condiciones de estancia digna"
Y agrega que los sanitarios carecen de mantenimiento en las instalaciones hidráulicas y presentan malas condiciones de higiene; los muros se encuentran deteriorados y las bardas están a un nivel de altura que "favorecen fugas esporádicas de los usuarios". Las mesas y sillas del área de visita familiar carecen de mantenimiento;  el área donde se aplica la sujeción se encontró falta de mantenimiento e higiene, así como presencia de humedad, cuenta solo con una colchoneta a nivel del suelo, sin ninguna otra clase de mobiliario y las camas se observaron sin mantenimiento.
El Mecanismo Nacional de Prevención subraya que el ingreso involuntario de un usuario a una institución psiquiátrica constituye una privación de la libertad, "pues el paciente es hospitalizado sin su consentimiento, debido a que carece de la capacidad mental para decidir libremente sobre ello; por lo tanto, cuando recupera esa capacidad y sus condiciones lo permiten, el personal médico está obligado a informarle de la situación de internamiento para que, en su caso, otorgue el consentimiento y su condición cambie a la de ingreso voluntario, de lo cual debe quedar constancia en el correspondiente expediente clínico".
Esta situación se da en el hospital de La Paz, pues "una vez que los pacientes mejoran su condición mental, no se les informa sobre su padecimiento y el tratamiento indicado, a efecto de que otorguen su consentimiento para que, en su caso, su condición cambie a la de ingreso voluntario"
Un factor de riesgo detectado durante la visita fue que no se cuenta con una partida presupuestal para vestido y calzado, el hospital se provee de esos artículos por medio de donaciones de familiares y asociaciones civiles. "Las personas que tienen un padecimiento mental, dice el informe, no se limitan a recibir una atención integral, sino también un trato humano y digno, que incluye la satisfacción de sus necesidades básicas de vestido y calzado"
Otra falla es que no existen criterios de clasificación para designar el área de estancia de los pacientes en los pabellones; sólo se les clasifica por sexo. "En este sentido, dice el documento, es de suma importancia que existan pabellones específicos y criterios de clasificación establecidos para ubicar en diferentes áreas o salas a los pacientes de acuerdo a sus características y edad, a efecto de evitar el riesgo de abusos o maltrato entre ellos", ya que "dentro de las características propias de las personas con padecimientos mentales, se exige la implementación de medidas específicas para garantizarles una estancia digna y segura en los hospitales psiquiátricos, a fin de evitar abusos físicos, inclusive de carácter sexual, de parte de pacientes que presentan estados de agitación, conductas particularmente violentas o con bajo control de impulsos, en perjuicio de otros pacientes"
Otra deficiencia detectada se da en la integración de los expedientes clínicos. "Es importante mencionar, agregan los visitadores, que esta clase de registros en un hospital psiquiátrico, constituye uno de los instrumentos esenciales como medio para prevenir el maltrato, ya que favorece la salvaguarda de los derechos relacionados con el ingreso y representan un elemento de prueba que puede ser utilizado por las propias autoridades cuando se les atribuya alguna responsabilidad al respecto". Sin embargo en el Hospital Psiquiátrico de La Paz, los expedientes carecen de historia clínica en todos los casos, refiriendo las autoridades entrevistadas, que "no cuentan con formato aprobado para su realización"
Para el Mecanismo Nacional "son preocupantes las carencias en materia de medicamentos, instalaciones y equipo, así como las deficiencias en los programas de prevención de enfermedades y el tratamiento, particularmente por la diversidad de servicios que comprenden la atención integral, médico-psiquiátrica que requieren los pacientes para proteger, promover, restaurar y mantener su salud mental, y que comprenden actividades preventivas, curativas y de rehabilitación". 
En ese sentido, se observaron deficiencias en los programas preventivos y en el equipo médico. El medicamento psiquiátrico es escaso, no se cuenta con sustancias adecuadas para manejo cotidiano, ni para mitigar crisis, así como en el abasto de medicamentos generales pues existe un inventario reducido, que es insuficiente para los requerimientos del hospital. 
En cuanto al personal médico, continúa el documento, se requiere la intervención de profesionales en diversas disciplinas como psicología, rehabilitación física y trabajo social, entre otras, quienes mediante el trabajo interdisciplinario implementen diversos programas que permitan la recuperación y el entrenamiento de habilidades y capacidades de los pacientes hospitalizados, necesarias para reintegrarlos a la vida en comunidad.
De acuerdo con la información proporcionada por los servidores públicos responsables del hospital,  se requieren de los servicios de psiquiatras, paidopsiquiatras, internistas, neurólogos, geriatras, odontólogos, anestesiólogos, médicos generales, psicólogos, terapistas, trabajadores sociales y/o personal de enfermería, entre otros.
Finalmente,  se dice que el personal no ha recibido capacitación sobre los estándares de examinación establecidos en el Protocolo de Estambul.